A pesar de su tamaño no muy grande es un óptimo perro de guardia, inteligente, vivaz, valiente y siempre atento. Muy duro y resistente, este perro se adapta a la vida al aire libre incluso, en los climas más duros, resultando también implacable cazador de ratones. La altura requerida es de 45 a 50 cm. La estructura es muy sólida y compacta y la capa puede ser de color negro o sal y pimienta. Su movimiento es elástico, elegante, ágil, libre y con buena cobertura de terreno.

Es el progenitor de las otras dos razas de Schnauzer: gigante y miniatura. Sus orígenes se remontan a una época muy antigua. Siempre ha estado difundido en toda Alemania, donde viven en perfecta armonía con los caballos.

La cabeza es bastante larga, cráneo fuerte con el occipucio poco marcado. Stop bien diferenciado entre las cejas. Labios negros, mordida en tijera. Los ojos son oscuros, de tamaño medio y ovales. Las orejas dobladas y caídas, de inserción alta, en forma de “V”. La nuca es fuerte. El tronco es recogido, las extremidades son fuertes y potentes, tiene un aspecto general de gran vitalidad que denota inteligencia y atención. El pelo, durísimo, puede definirse como de "alambre" y necesita un adecuado cuidado para competir en exposiciones. Se estila cortar la cola y las orejas. Características son también sus cejas hirsutas que hacen sombra a los ojos y su barba rígida.

Sus rasgos típicos son su temperamento seguro y su circunspecta tranquilidad. Especialmente remarcable es su buen carácter, su alegría por los juegos y su apego proverbial a su amo. Es un magnífico perro de familia, de compañía y utilidad.