Utilizado durante mucho tiempo como perro de caza, convertido luego en el típico perro de los cocheros, para terminar entre las razas de compañía, el Dálmata debe su último momento de esplendor a la famosa película de Walt Disney "101 dalmatas". Es la mascota de los cuerpos de bomberos de los EEUU.

Aunque en esta raza el nombre indica su tierra de origen, otra teoría indica que podría ser el fruto de la cruza entre pointers y bullterrier hecha por criadores ingleses. Conocido en Italia desde desde el siglo XVII, cuando eran tenidos en gran consideración por los Papas. Los nobles franceses del siglo XVIII solían hacer seguir sus carrozas por jaurías de dálmatas. 

Es un perro de constitución fuerte y sólida pero elegante, sin mostrar signos de pesadez. De perfil simétrico, libre de tosquedad y pesadez de movimiento, capaz de gran resistencia y buena velocidad. La cabeza tiene el cráneo relativamente ancho, las orejas son de nacimiento alto, llevadas colgando, con la base redondeada. Los ojos brillantes, relucientes y redondos le confieren una expresión atenta e inteligente. El cuello es moderadamente largo y arqueado y el tronco tiene un dorso sólido. Las extremidades están bien musculadas. El pelaje es corto, duro, denso. El color moteado es su característica más distintiva siendo de fondo blanco puro con manchas netas de color negro intenso o de color marrón hígado, sin mezclarse unas con otras. Las manchas deben ser redondas, bien definidas y bien distribuidas siendo las de la cabeza, cola y extreminades de menor tamaño que las del resto del cuerpo. 

El dálmata es un perro sociable y amistoso, nada tímido ni vacilante, muy activo y de gran energía física.