Nada
mejor para aprender de un deporte que a través de la historia de
sus más excelsos campeones
MICK THE MILLER, el galgo de carreras más famoso del
mundo, logró la inmortalidad en el corazón del pueblo irlandés e
inglés, y siendo el único galgo que se convirtió en una estrella
de la pantalla grande, y sobre quien se han escrito biografías
como "Mick the Miller, the Legend".
MICK THE
MILLER, nacido en 1926- Glorious Event-Na Boc Lei Su
taxonomía hoy día se exhibe orgullosamente en el Museo de
Historia Natural de Londres, luego de haber sido transladado
desde Tring tiempo atrás, lugar en donde su nombre es sinónimo
de orgullo en el lugar. Pasados 70 años, continúan inolvidables
sus increíbles proezas.
Mick the Miller recibe su nombre por Mick Miller, un hombre que
trabajaba para el vicariado en donde el perro nació y se crió.
Mick the Miller fue criado por un sacerdote en una parroquia de
Irlanda. El perro desarrolló un vida normal en sus primeros
meses, hasta que cayó enfermo por moquillo, una contagiosa
enfermedad viral que afecta a los perros poco antes de cumplir
su primer año.
Como no habían vacunas contra ello en los los años '20, las
chances de sobrevivir para un perro afectado eran magras. Pero
el Padre Brophy, que se había encariñado mucho con el cachorro,
se rehusó a perderlo, y de ese modo lo llevó al Dr Arthur
Callanan, un veterinario muy reconocido en aquel entonces,
además de ser el manager de Shelbourne Park.
El estado de Mick the Miller era muy delicado, pero Callanan, al
revisarlo, dio brios renovados de esperanza al sacerdote. Bajo
su basta experiencia, aseguró que existía una posibilidad de
salvar al cachorro, y preguntó al Padre Brophy si podría dejar
al cachorro con él un tiempo para intentar recuperarlo.
Tras días y noches de cuidados intensivos, pronto el cachorro
logró una sorprendente recuperación; y varios meses más tarde,
ya fuera de peligro, Mick the Miller ya gozaba nuevamente de
buena salud. Fue retornado al sacerdote bajo la especial
recomendación de que lo cuidara mucho durante su larga
convalescencia. Pronto Mick the Miller se convirtió en un perro
adulto y fuerte.
No fue sino hasta 1928, cercano a los dos años de edad, que Mick
the Miller realizó su estreno en las pistas. Ganó fácilmente en
su debut y continuó demostrando que era un perro fuera de serie
presentación tras presentación, para completar un total de 15
victorias sobre 20 carreras disputadas. Uno de sus hermanos,
Macoma, se convertiría en uno de los mejores perros de carreras
de obstáculos para greyhounds en la historia.
El entrenador Mick Horan sabía que tenía en sus manos a una real
máquina de correr, y dio aviso al Padre Brophy para que incluya
al crack en el prestigioso Derby Inglés. El viaje de Mick the
Miller a Inglaterra fue en mayo de 1929. Como preparación para
el Derby, fue anotado en una carrera en el canódromo White City,
donde obtuvo un triunfo que causó sensación, quedando
inmediatamente nominado como el favorito del Derby. En esos
días, el Derby era restringido a 48 participantes que se
decidían sobre 4 rondas. Por ese único año, para evitar
problemas de tráfico, se decidió que la final contaría sólo con
cuatro en vez de seis participantes.
Luego del exitoso debut en suelo inglés, y antes de disputar el
Derby, el Padre Brophy recibió una cuantiosa oferta para comprar
al galgo. El sacerdote decidió subastar a la estrella, y al
final, un corredor de bolsa lo adquirió por el valor de 800
guineas. En aquel tiempo, eso era mucho dinero por un galgo, y
fue suficiente razón para que la noticia fuera publicada al día
siguiente en todos los diarios.
Gran cantidad de aficionados se concentraron para ver al mentado
Mike the Miller en su primera ronda del Derby de 1929. No sólo
ganó, sinó que además rompió la supuesta inquebrantable barrera
de los 30 segundos para las 525 yardas (480m) de White City.
Voló en la segunda ronda y arrasó en la semifinal,
convirtiéndose en el favorito de la ronda decisiva, que definía
las 700 libras de premio. No obstante, allí fue batido por
Paltinus, quedando en el 2do lugar. Pero ese día los dioses
estuvieron de su lado, pues anularon la carrera debido a que
hubo una colisión que involucró a todos menos el que cruzó en
primer lugar. Media hora más tarde se volvió a correr, y Mick
the Miller venció, dejando a Paltinus de escolta.
Con esto, la estrella había logrado ser casi una celebridad, y
de hecho, esta fue la primera de las tantas famosas victorias en
Gran Bretaña.
El perro tuvo su nueva residencia en las perreras del trainer
Sidney Orton, que se encontraban en Wimbledon cuando el Padre
Brophy y su antiguo entrenador Mick Horan regresaron a Irlanda
como hombres ricos.
Trepando ya a las 600 yardas en la enorme pista de West Ham, el
famoso galgo redujo las esperanzas de sus rivales adjudicándose
la carrera por siete cuerpos temprano en la mañana; y en el
atardecer del mismo día, tomó las 200 libras de premio al vencer
en la Final por cuatro cuerpos.
Obtendría 1200 libras en premios tras salir victorioso en varios
matches y eventos antes de cambiar nuevamente de manos y por la
suma de 2000 guineas. Su adquisidor, Arundel Kempton, gastó esa
enorme cantidad en Mick The Miller para obsequiárselo a su
mujer.
El año 1930 significó otra próspera temporada para el campeón
Mick The Miller, ganando innumerables carreras y tomando el
Derby de ese año -el segundo consecutivo en su campaña- y siendo
el primer perro en lograrlo dos veces consecutivas, triunfando
en la final con otro espectacular registro para la distancia.
El perro continuó cumpliendo un exigente calendario de
actuaciones en Cesarewitch, West Ham, saliendo invicto en todas
ellas; y además, se adjudicó el Welsh Derby en Cardiff, en el
mes de julio.
Eventualmente, tantas carreras cobraron desgaste en el crack, y
éste quedó al mes siguiente eliminado en la primera ronda del
Laurels, en Wimbledon. Sobrevino un merecido descanso para Mick
the Miller, que no fue visto en competencia sino hasta la
primavera de 1931. Allí, retornó con nuevos bríos, obteniendo un
invicto en las rondas del Spring Cup, en Wembley. Disputaría una
carrera liviana a modo de preparación con miras a su tercera
participación en el Derby. Sintiendo los efectos de su
sobrecargada campaña, el galgo se debió conformar con ser el
segundo mejor en las tres rondas que lo guíaron hasta la final
del famoso premio. Por lo menos, estaba clasificado.
Llegó la gran noche, y su entrenador, Orton, seguía conservando
la total confianza en su pupilo. Mick the Miller corrió con todo
el corazón la carrera de su vida, llegando adelante por la
cabeza sobre Golden Hammer. Pero para gran estupor de sus
seguidores, al momento de cruzar la meta sonó la temida bocina
que declaraba la carrera nula. Los jueces aducían que Ryland R
había atacado a Seldom Lad en carrera, lo que la constituía como
inválida según el reglamento. Lo que había ayudado al crack a
ganar su primer derby, ahora le complicaba la obtención de su
tercer gran título.
El post time de la nueva carrera fue entonces programado media
hora más tarde, sin Rynald R. No fue el tiempo suficiente para
que las viejas patas de Mick the Miller se pudieran recuperar, y
el gran crack quedó cuarto de Seldom Led, quien paradójicamente
había arribado último en la carrera anulada (*Hoy día estas
anulaciones son impensadas en las carreras de galgos actuales
[wikipedia]).
Esto parecía ser el ocaso para Mick the Miller en las pistas. No
obstante, apilaría una última azaña para gran alegría de sus
fans. A pesar de sobrepasar los cinco años de edad, participó en
el St. Leger de Wembley, sobre 700 yardas, quedando invicto tras
ganar todas sus rondas, en cuya final fue la última vez en que
el gran Mick the Miller se vio en la pista.
Se retiraba entonces, con 15 triunfos de 20 carreras disputadas
en Irlanda; y con 46 carreras (19 de ellas en forma consecutiva)
de 61 corridas en Inglaterra: un total de 61 obtenciones de 81
participaciones.
Como reproductor, dio muy bien, produciendo a numerosos
ganadores clásicos, siendo las mejores de ellas dos hembras,
Gallant Ruth y Gretas Rosary.
Murió a la edad de trece años. La autopsia arrojó lo que en
muchos cracks (en las carreras de caballos) sucedió: el corazón
de Mick the Miller pesaba una onza y media más que el corazón de
un galgo de carreras normal.
NO SOLO EN LAS CARRERAS
En 1934, tres años luego de su retiro, el famoso galgo participó
en la película "Wild Boy" siendo una de las principales
atracciones del film por su encantadora vivacidad e
inteligencia, algo que los fans del perro lo conocían
sobradamente, pero que gustó mucho a los ajenos al tema.
DERBY DE 1930
En ese año, Mick the Miller lograría la proeza de convertirse en
el primer galgo de la historia en ganar dos derbies
consecutivos. Pero a pesar de ser favorito para la final del
mismo, nadie lo daba por fija. Tenía la oposición de una
excelente hembra, Bradshaw Fold; y el ganador del Derby Irlandés
del año anterior, Jack Bob. El gran Mick largaba por dentro, del
trap nro 1, lo que le signifió algo a favor. Conservó su carril
y dominó en la primera curva; dejando atrás a sus rivales fuera
del cordón; y mejoró en el opuesto. En la meta dominaría por 3
largos, con Bradshaw Fold segunda (había largado del trap 3). El
célebre ganador del derby Irlandés llegó decepcionantemente
último. El cronómetro indicó 30.24 para los 480m.
RESULTADO DE LA FINAL DERBY INGLES 1930
1. Mick the Miller 3cps.
2. Bradshaw Fold 2cps.
3. Mick McGee cbz.
4. Dresden 2cps.
5. So Green 2cps.
U°. Jack Bob
Traducido y editado por mike82s. Fuente: thedogs.co.uk. Año 2004
Agradecemos al Sr Miguel Almaza la gentileza de permitirnos
reproducir este artículo publicado originalmente en
www.podotroclear.com |